Cumplimos con este 'recap' dos tercios de la primera temporada de 'Sense8', que se nos está pasando demasiado rápido. El experimento sensorial y multicultural de los Wachowski nos ha llevado a un punto de veneración de las tramas y personajes de la serie. Tiene errores, muchos, pero llegados a este momento poco importan en comparación con el amor y la capacidad de absorción de la serie. Hay 'spoilers' del octavo episodio a continuación, proceded con cautela.
Lo de las organizaciones internacionales malvadas y conspiraciones del gobierno no es nuevo. Podría serlo con 'The X-Files', pero a esta altura ya no. Sin embargo si no la tenemos en todo drama 'high concept' que se precie parece que nos falta algo. Aquí las siglas BPO significan la persecución, la búsqueda y captura de todos los 'sensates' por el mundo adelante con apoyo de los gobiernos y métodos draconianos. Y más concretamente, 'the Biologic Preservation Organization'.
Hablando de sus métodos, en estos están tanto la represión de todos estos individuos con capacidades extra-sensoriales mediante la lobotomización como el uso de estos para cazar a sus congéneres. En el caso de uno de los últimos pacientes del Dr. Metzger (Adam Shapiro), ambas al mismo tiempo. Porque el líder de esta organización, aparte de ser un individuo también dotado de habilidades semejantes, parece tener mucho interés en Nomi Marks (Jamie Clayton) en particular.
Por suerte ahí están Will Gorski (Brian J. Smith) y Sun Bak (Doona Bae) para arreglar el entuerto con el instinto policial de uno y las habilidades de lucha de la otra. La serie logra montar una secuencia a medio camino entre una película de artes marciales y una de persecuciones policiales con la intervención de nuestro querido Capheus Van Damme (Aml Ameen), que no está ocioso. Que además esté localizada en San Francisco nos lleva directamente al cine de acción de los años ochenta.
Porque si algo les gusta a los Wachoswki, aunque no sabemos si tanto a JMS y su gran ego, es homenajear a otros estamentos clásicos del cine. Al albergar cada personaje su distinta historia se están tocando muchos géneros dentro de 'Sense8', incluido el de atracos con las tramas de Wolfgang (Max Riemelt), que como suele pasar en estas películas terminan bastante mal. A través del fatídico destino de su compañero de trapicheos se nos cuenta la infancia del personaje, que es otro amor.
Hablando de amor, lo de Gorski con Riley Blue (Tuppence Middleton) ya es casi equiparable a lo de Wolfgang con Kala Rasal (Tina Desai), aunque menos trágico. Supongo que el compartir experiencias y sensaciones diariamente acabe por generar afinidad entre unos personajes y otros. Como la que sentimos nosotros por Lito (Miguel Ángel Silvestre), que aunque siga siendo el personaje más cómico del grupo eso no significa que lo esté pasando bien.
No os mováis de vuestras pantallas, que mañana continuamos con nuestros análisis.
David Valverde, @CapitanValverde.
